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jueves, 17 de agosto de 2017
PARA HONDA, WAIGAYA ES EL CAMINO. TAMBIÉN PUEDE SERLO PARA TU PYME.
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Claudio Zambito
en
MUNDO PYME
12 h
·
PARA HONDA, WAIGAYA ES EL CAMINO. TAMBIÉN PUEDE SERLO PARA TU PYME.
En el gigante automovilístico japonés, las reuniones no planeadas y sin agenda son omnipresentes e indispensables.
Todos llevaban pantalones blancos y camisas blancas con sus nombres bordados en rojo en la parte superior derecha. Es el uniforme que cada empleado de Honda Motor Company, ya sea instalador de tuberías o presidente, lleva en el trabajo en todas las fábricas u oficinas. Se pretende disminuir así la influencia del rango; en el momento a momento dar y recibir las responsabilidades diarias de los trabajadores de Honda, todos los puntos de vista o sugerencias son iguales. Usted puede convenir o pensar que son tontos, pero el título de los demás o la posición, camuflado por sus uniformes, no debe ser un factor para llegar a su conclusión.
Tales reuniones imprevistas y sin forma son el sello distintivo de la Honda y se llaman waigaya , que no es una palabra en japonés o en ninguna otra lengua, sino un nombre dado por Takeo Fujisawa, el socio de negocios de Soichiro Honda fundador de la empresa que en inglés, podría ser bullicio . Es el ruido de la discusión acalorada y el libre flujo de ideas; representa un campo de batalla de hechos y opiniones, de comunicación caótica, de desacuerdos abiertos y de decisiones inhumanas.
En una reunión un operario de montaje notó: “Hacemos algo muy mal si un ligero problema en el motor no se aborda hasta el final de la línea de montaje del vehículo, cuando no tenemos otra opción que desarmar el motor, para arrancar el coche de nuevo. Deberíamos haber descubierto este problema antes. ”
“Si no incluimos a nuestros asociados en la toma de decisiones, estamos ignorando potencialmente nuestro activo más valioso”. Concepto antiguo que no se aplica en Honda.
Soichiro Honda dijo que el éxito es un fracaso del 99 por ciento. Y, de hecho, las reuniones espontáneas y abiertas de Honda pueden tener poco valor la mitad del tiempo, y a menudo parecen ser un desperdicio de recursos. Pero en general, en la experiencia de Honda Motor, waigaya conduce directamente a mejoras significativas en productividad, procesos, sistemas y desempeño que de otro modo habrían estado ausentes.
Puede ser una reunión de media hora sobre un problema específico que debe abordarse de inmediato, o puede ser una serie de sesiones que se prolongan durante semanas o meses sobre una nueva fábrica en desarrollo o una actualización de modelo de vehículo. Cada departamento en Honda practica waigaya; ventas y comercialización, fabricación, mantenimiento. Tan sólo tres personas o hasta 20 pueden asistir.
En el corazón del waigaya hay un solo concepto: las paradojas y los desacuerdos son la esencia de la mejora, la mayoría de las compañías temen estas dualidades
Aunque el waigaya puede parecer demasiado libre para ser productivo y puede parecer carecer de un componente de liderazgo lo suficientemente fuerte como para producir resultados reales, estas reuniones realmente tienen un marco organizativo que, al menos en teoría, asegura su éxito. De hecho, los principios centrales del enfoque del waigaya de Honda Motor pueden explicarse mejor por cuatro reglas directas:
1. Todos son iguales en waigaya, y todos pueden expresar sus pensamientos con impunidad.
2. Todas las ideas deben ser debatidas hasta que sean probadas válidas o rechazadas.
3. Una vez que una persona comparte una idea, él o ella no la posee más-pertenece a Honda, y el grupo puede hacer con la idea de lo que será.
4. Al final del waigaya, se generan decisiones y responsabilidades, una lista precisa de quién debe hacer qué y cuándo.
“Waigaya para mí significa insatisfacción perpetua”, dijo un ejecutivo de Honda. “En nuestra empresa, la auto-satisfacción es el enemigo”.
De la discusión incansable-bla, bla, bla, waigaya, waigaya, waigaya- algo realmente útil surge; una idea simple y silenciosa surge del ruido. Resumen de nota del Business Times
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